Chocolate Catatumbo: el emprendimiento que surgió como reemplazo a los cultivos de coca

Esta la historia de José Joaquín Peñaranda, que cambió los cultivos de hojas de coca por chocolate artesanal.

Con un brazo adolorido y con dos cavas grandes llegó a la ciudad de Ocaña José Joaquín Peñaranda, un catatumbero que cambió los cultivos ilícitos por chocolate artesanal.

Comenzó de raspachin a la edad de 15 años, dañando sus manos con una mata, que para muchos jóvenes, es la única alternativa para salir de la pobreza en la región.

En el logotipo de su emprendimiento se encuentra la imagen de su padre, quien inculcó en él el amor por el campo.

Pero hace un año, con la crisis cocalera que se vive en el Catatumbo, José Peñaranda decidió poner fin a estos cultivos y buscar una nueva alternativa. 

Llegó y le comunicó esto a su familia, que desde el principio lo han apoyado y han sido el soporte para que él recorra estas montañas mostrando su emprendimiento. 

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MALTRATO

Un día José fue a vender un kilo de coca, cuando llegó donde los compradores, con lo primero que se topó fue con la grosería de los negociantes de este cultivo. 

Ese maltrato que sufrió, lo llevó a tomar una decisión y a colocarse una meta: no volver a cultivar ni a negociar la mata de coca. Así fue como nació Chocolates Catatumbo.

Desde ese momento, este campesino buscó en el cacao y en sus derivados su nuevo futuro, un proceso que desde niño lo vio en la región y que era el momento de mostrarlo al mundo.

Con el apoyo de sus allegados y con la materia prima que se da en el Catatumbo, José dio sus primeros pasos como emprendedor en la vereda Agua la Sal, jurisdicción de El Tarra.

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SUEÑOS

e manera artesanal y en medio de la carretera entre Tibú y Cúcuta, se encuentra el local de Chocolates Catatumbo, una proyecto que tiene  un horizonte claro: ayudar a los cocaleros.

Los sueños de este catatumbero es sacar a su familia adelante, darle un mejor futuro a sus hijos, que ellos estudien, se preparen, para que nunca olviden este trabajo que comenzó su padre.

Hijo de José Peñaranda, representando el emprendimiento de su padre.

Además, uno de sus mayores anhelos es generar empleo en la región, ayudar a que esos cultivadores de coca busquen otros trabajos en sus vidas, para que no sufran del glifosato.

Con lágrimas que bajan por su mejillas, José le pide a los colombianos que los ayuden a surgir, que este chocolate que él realiza lo hace con mucho amor y que al probarlo quedarán encantados. 

Si quieren contactar a José y comprarle su chocolate, lo puedan llamar al siguiente número: 3026888508

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