En Ocaña se compró el antibacterial, alcohol y tapaboca más caro del país: Contraloría

A través de un boletín de prensa, la Contraloría General de la Nación evidenció que el contrato de suministro de insumos y elementos de protección frente al coronavirus tiene sobrecostos en todos los productos.

Una vez más el ente vigilante de los recursos públicos evidencia sobrecostos en el contrato de suministro de productos para afrontar el coronavirus en Ocaña.

En el boletín de prensa 054 de este martes 15 de abril, la Contraloría le responde al alcalde Samir Fernando Casadiego Sanjuan demostrando que si hay sobreprecio en su contratación.

El alcalde, a través de medios de comunicación local expresó que no existía valores elevados en el contrato y que todo era producto de la fluctuación de los precios por la crisis.

En su legítima defensa ante la opinión pública, Samir Casadiego manifestó que esos valores corresponden al 13,5 % de aumento que tienen los contratos con el ente público.

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SOBRECOSTO EN 41,04 %

El Contrato SDH-053 por $112.435.000 con el que se abasteció la alcaldía para afrontar la crisis del Covid-19, tiene según la Contraloría un sobrecosto total de 41,04 %. 

Para demostrarlo, el organismo de control se tomó la molestia de averiguar los mismos insumos en las droguerías X y La Rebaja en Ocaña. 

En la consulta, la Contraloría encontró que el contrato que Aura Stella Padilla Jaime con José Rodolfo Quintero Montaguth debió costar $79.719.600 y no  $112.435.000.

Dicho proceso contractual en medio de la emergencia tiene un sobrecosto de $32.715.400, razón por la que la lupa se encuentra sobre la alcaldía de Ocaña.

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LOS INSUMOS MÁS COSTOSOS

La contraloría dice que el alcohol antibacterial comprado en Ocaña es el más costoso del país con un 197 %. El galón que vale $38.000 en el mercado lo adquirieron por $113.000.

También informó que el gel antibacterial que vale en realidad $65.000 la alcaldía lo compró en $170.658, evidenciando un sobrecosto del 197 %.

Cada tapaboca convencional fue adquirido por $1.695 pesos.

Las caretas N-95 costaron un 110 % más de lo normal y los tapabocas convencionales un 41 % más de lo que se consigue en un farmacia del país.

Además de este contrato la alcaldía incumplió las normas de contratación en medio de la emergencia sanitaria al invertir dineros públicos en publicidad por $24.742.000.

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