Lafér, como es conocida en el mundo musical, vivió gran parte de su niñez en el barrio San Fermín, un lugar rodeado de zonas verdes, una cancha de micro y donde se escuchan diferentes tipos de música.
Actualmente hace parte del grupo ChocQuibTown, que fusiona diferentes sonidos y donde la ocañera demuestra ese talento que desde niña ha traído en sus venas.
Su hermano la acercó a la música. Mientras él tocaba una guitarra, Kathy se dedicaba a escribir poemas y a querer aprender a interpretar ese instrumento.
Pasó por muchas dificultades, pero como lo dice ella en unas de sus canciones, siempre buscó la manera de volver a creer y la música ha sido su refugio.
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FAMILIA
María Stella Ovalle, madre de Kathy, fue una enamorada de todo lo relacionado con el arte y en Ocaña siempre hizo presencia en obras de teatro y cuestiones de actuación.
Su padre, de Buenaventura, Valle del Cauca, conoció a María Stella en Barranquilla, formaron una familia y a los años decidieron trasladarse a la ciudad de los Caro, donde nacería Lafér.
Además, creció con la compañía de su madrina Bexy Mendoza, una profesora de actuación y una mujer empoderada con las expresiones artísticas en el municipio.
Todo esto ayudó para que Kathy se fuera formando como esa gran artista que hoy representa a Ocaña en diferentes escenarios, compartiendo con cantantes de talla mundial.
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INGENIERÍA CIVIL
Kathy comenzó a prepararse académicamente, se graduó de bachiller del colegio José Eusebio Caro y ahí tomaría una decisión difícil, escoger una carrera universitaria.
“Venimos de un mundo en el que se piensa que hacer arte no es una carrera, que no da estabilidad”, afirma Lafér al recordar porqué escogió estudiar Ingeniería Civil.
Aunque no se consideraba mala para esta ingeniería, sentía que se forzaba mucho y decidió estudiarla porque era vista como una profesión que podría darle una base sólida en lo económico.
Entró a estudiar a la Universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña, pero aunque estaba rodeada de números, la escuela de Bellas Artes fue un aliciente.
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DESPEDIDAS Y DECISIONES
Mientras estudiaba en la ‘pacho’, Kathy Fernanda seguía con lo musical, estando en clases de canto y participando en los eventos de la escuela de Bellas Artes.
Pero un hecho marcaría su vida y daría un giro rotundo a todo eso que estaba realizando. Con lamento recuerda el fallecimiento de su madre y un año después, el de su padre.
“En ese momento tuve un choque de conciencia de decir: yo ya no tengo por quien estar haciendo esto y eran ellos (padres) mi motivación”, comenta Lafér sobre la razón de dejar la Ingeniería Civil.
Era octavo semestre de la carrera, dejó las clases de cálculo, física y matemáticas, para adentrarse por completo a lo que siempre le brindó paz y tranquilidad: la música.
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SUEÑOS
Con 300 mil pesos en el bolsillo y una maleta, Kathy Fernanda Angulo Ovalle decidió irse a vivir a Bucaramanga y a buscar eso que tanto soñó estudiando.
En la ciudad de los parques la recibió la madre de una amiga, fue becada de una academia de Jazz y trabajaba como auxiliar administrativa para mantenerse.
“Encontré mi lugar, porque soy muy fan del Jazz, porque hacen parte fundamental de mi técnica y de mi canto”, expresa con mucha alegría esta ocañera por haber pertenecido a esta escuela.
Transcurría el año 2016 y en esa academia Lafér conocería a Gloria Emilse Martínez Perea, más conocida como ‘Goyo’, cofundadora de ChocQuibTown.
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NUEVOS AIRES
‘Goyo’ conoció el talento de la ocañera, la buscó por redes sociales y la invitó para que audicionara en Bogotá y si quedaba, haría parte de lo que ella llama la familia de ChocQuibTown.
“Llegué, audicioné, le gustó mi tumbao’ y el flow y ya llevo ocho años ahí con ellos”, afirma con una gran sonrisa Kathy, al recordar ese momento que sería un gran escalón en su vida.
Con ChocQuibTown comenzaría a recorrer el mundo, recuerda que su primera presentación por fuera del país fue en Estados Unidos, una grata experiencia.
Además, estuvo como corista de Maluma, otro trabajo que la llena de orgullo, puesto que recorrió Europa con el antioqueño y conoció a muchos cantantes que admiraba.
Con ellos ha aprendido no solo lo musical, sino también a trabajar en equipo, en ser constante y en pensar también en su propia música, que toca emociones.
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CANCIONES
Querella, Sin despedirme y Calma, son algunas de las canciones que conocemos de esta ocañera, que por medio de su hermosa voz transmite diferentes temas.
En Querella, Lafér narra el sufrimiento que ha dejado la guerra en nuestro país, crecer en Ocaña y ver diariamente las noticias negativas, la llevó a componer esta bonita canción.
Sin despedirme y Calma son dos canciones hermanas, en la primera habla un poco de ese hecho que marcó su vida, el fallecimiento de sus padres y del dolor de perder a un ser querido.
En Calma, afirma que esa herida y muchas otras pasarán, pero mientras tanto ella seguirá buscando motivos para creer y superarse, siendo la música un motivo para expresarlo.