Tras un largo historial de delincuencia en el barrio Promesa de Dios, la comunidad ha tenido que buscar alternativas para protegerse de los ladrones que azotan la ciudad.
Durante los últimos años, los asaltantes no dan tregua y la inseguridad se ha convertido en parte de la cotidianidad para los ocañeros.
Atracos a personas, hurtos de automóviles o motocicletas, robos en propiedades y otras transgresiones, han llenado de temor a la comunidad ocañera, pues ahora ni en sus propias casas se sienten seguros.
Entre el 2021 y lo que va del 2022, se han registrado 221 casos de hurtos a personas, según cifras de denuncias entregadas por la Policía de Ocaña a Wichos Informa.
Los últimos meses del año 2021 son en los que registran el mayor número de atracos a personas y para el 2022 el mes de Abril fue el mes con más denuncias de este tipo.
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PROMESA DE DIOS
El barrio Promesa de Dios, ubicado al sur de la ciudad de Ocaña, hace algunos años gozaba de muy buena seguridad, pues sus habitantes podían salir incluso a altas horas de la noche y no corrían ningún riesgo.
Actualmente, a nivel nacional y local, la seguridad se ha deteriorado y en este sector se han presentado incluso un robo cada dos días.
Por tal razón, los habitantes de esta zona sienten gran desconfianza y ya no se atreven a salir después de las ocho de la noche por la oscuridad y soledad de las calles.
Mario Coronel, presidente de la Junta de Acción Comunal menciona que los altos índices de inseguridad en este sector se derivan en gran manera de la localización del barrio. Une estratégicamente a la Carretera Central y la Piñuela con La Circunvalar.
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SEGURIDAD URBANA
Existen fallas en la rápida reacción de la Policía Nacional en esta zona, ya que algunas veces no responden al llamado de la comunidad ante algún acto delictivo.
Esta falencia tiene que ver con lo extensa que es la comuna tres a la que pertenece Promesa de Dios, comprendida por otros 25 barrios y con tan solo 2 policías para dicho cuadrante.
Los habitantes del barrio han decidido en cabeza del presidente de la JAC, buscar soluciones para estas problemáticas y a su vez ofrecer protección a la comunidad.
Fue así como los frentes de seguridad se convirtieron en una alternativa para brindarle tranquilidad al barrio, puesto que algunos habitantes del sector se reúnen cada cierto tiempo a realizar recorridos por las entradas de la zona con palos y garrotes en mano.
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ALARMA DE SEGURIDAD
Por medio de unos consejos de seguridad que realizó la Policía Nacional con varios líderes comunales, surgieron los convenios para instalar las alarmas de seguridad en barrios en los que se estaban presentando mayores hechos delictivos.
Después de instalada esta alarma, se le informó a los habitantes del barrio que si deseaban tener acceso a la misma, debían acercarse al presidente de la -JAC- para que les instalara en el celular la aplicación con la que funciona.
Esta alarma ha servido en muchas ocasiones para evitar y prevenir algún hecho delictivo que se quiera cometer en el barrio, ya que los ladrones salen huyendo al escucharlas.
En Ocaña existen aproximadamente otros seis barrios que cuentan con estas alarmas, como por ejemplo Cuesta Blanca y Belén.
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¿CÓMO FUNCIONA?
La ‘App Comunitaria’ en Promesa de Dios está alojada en un servidor de ‘eWeLink’ que es instalada a cualquiera de los moradores del barrio por parte del presidente de Acción Comunal del barrio.
El líder barrial es el encargado de la plataforma de mando por medio del cual puede habilitar la herramienta digital a los preocupados habitantes.
Cuando alguno de los habitantes está en peligro por el actuar de los delincuentes, accede en cuestión de segundos a la ‘App’ y activa la alarma que avisa a la policía y al resto del barrio.
La advertencia al activarla, debe ser argumentada a través de un grupo interno en la herramienta digital donde catalogue el peligro como inminente o acto sospechoso.
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