El desgarrador testimonio fue expuesto por un soldado profesional, quien era el encargado de ponerle los uniformes y las armas de combatientes a las víctimas.
Ante la Justicia Especial para la Paz – JEP-, un militar narró cómo se ejecutaba el plan para asesinar a jóvenes reclutados con falsas promesas.
Los jóvenes provenientes de Soacha – Cundinamarca, fueron trasladados al batallón General Santander de Ocaña horas antes de ser asesinados.
Un desmovilizado de la Farc conocido con el alias de ‘Pullanube’ era el encargado de reclutar a los muchachos y llevarlos a los lugares de ejecución.
El soldado afirmó que los jóvenes incluso hasta el día de su asesinato no sospechaban lo que les iba a suceder. Sus verdugos los trataban con tranquilidad.
EL PLAN DE EJECUCIÓN
El testimonio del militar describe que todo el plan para hacer pasar a jóvenes inocentes por combatientes era preparado milimétricamente.
Las víctimas eran marcados con pulseras de caucho negras, se les ponía a escribir para conocer si eran diestros o zurdos y así ubicar el arma tras el asesinato.
Siempre salían a la medianoche y las ejecuciones se realizaban en horas de la madrugada. Los jóvenes eran llevados de civil para ser ejecutados.
Para asesinarlos, simulaban un combate replegándolos por la zona para que no quedarán juntos. Cuando los llamaban le disparaban de frente.
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ASESINADOS POR EL ESTADO
Recordemos que, para enero de 2008, Ocaña fue epicentro de un atroz plan de las fuerzas militares de asesinar a inocentes para pasarlos por combatientes para reclamar bonificaciones.
En total fueron 14 jóvenes los asesinados por el estado y enterrados en una fosa común como guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -Farc-.
Desde entonces, las progenitoras de las víctimas conocidas en el mundo como ‘las madres de Soacha’ han luchado para que la muerte de sus hijos no quede en la impunidad.
A la fecha, una veintena de militares han sido condenados por estos hechos.
