Se levanta a las cinco de la mañana al igual que los otros reclusos, ve televisión gran parte del día y ha mostrado arrepentimiento por haber intentado asesinar a Ingrid Johana Espejo.
Como un recluso más, así es tratado el concejal de Ocaña Deiby Alberto Arias en la cárcel Modelo de Ocaña, donde fue internado tras su captura en la madrugada del sábado 18 de junio.
El concejal de Ocaña que fue aprehendido en medio de un operativo direccionado desde Bogotá por parte de la Fiscalía Genral de la Nación, ingresó al reclusorio de Ocaña hace aproximadamente dos semanas.
Arias fue capturado por los delitos de acto sexual violento en concurso con violencia intrafamiliar agravada en contra de su pareja sentimental Ingrid Johana Espejo el pasado siete de mayo.
www.wichosinforma.com conoció de primera mano, la cotidianidad de Arias que pasó de ostentar una curul en el concejo de Ocaña a ocupar una banca por horas en la cárcel ocañera.
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CONCEJAL PRESO
Deiby Arias es levantado al igual que el resto de sus compañeros de patio a las 5 de la mañana todos los días. A esa hora se baña y luego hace fila para recibir su desayuno. Lo mismo hace a las 11 am y cuatro de la tarde.
Duerme con dos personas más en un patio alterno creado por las directivas de penal en medio de la pandemia. Lo único que tiene es un televisor grande frente al cual pasa la mayor parte del día.
El resto del tiempo recorre los escasos metros del patio donde fue ubicado conversando con los demás cautivos. Ha expresado que está arrepentido de lo que hizo. Se queja bastante de la comida.
El caso de Arias es dirigido desde Bogotá, por eso demoró su ingreso a la cárcel de Ocaña. Hace pocos días recibió la primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 junto a decenas de prisioneros.
Su día termina a las siete de la noche cuando son obligados a ingresar a sus lugares de descanso. Esa es la rutina del concejal que espera sentencia condenatoria por los delitos imputados.
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