Gran parte del gabinete municipal de Convención, Norte de Santander rompió la cuarentena nacional para festejar el cumpleaños de uno de sus compañeros.
Tal parece que en el municipio ‘panelero’ de Convención la ley de aislamiento obligatorio es solo para algunos y no para todos.
Este domingo tres de mayo, Colombia conoció de la parranda que varios funcionarios de la alcaldía hicieron al festejar un cumpleaños.
El hecho que se constituye como grave al referirse de funcionarios públicos, no ha tenido respuesta por parte del alcalde del municipio, 48 horas después del episodio.
La noticia que trascendió a medios nacionales como RCN, Blu Radio y Pulzo, no ha producido una sanción ejemplarizante para los funcionarios.
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LOS HECHOS
El pasado sábado en horas de la noche, por lo menos siete funcionarios de la alcaldía de Convención violaron la cuarentena para festejar un cumpleaños.
La festividad del natalicio de Julián Torres, secretario de Planeación se extendió hasta altas horas de la noche en pleno casco urbano del municipio.
De la parranda hacían parte Jorge Armando Solano y Cristian Sanguino de la oficina de planeación, Fernando Jaramillo, Jefe de prensa y Lucy Rodríguez.
También participaron Carlos Guevara y Magreth Gómez, pertenecientes a la secretaría de Gobierno. Hubo maicena y bebidas alcohólicas, como en año nuevo.
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SANCIONES A MEDIAS
En un video a través de Facebook, el cumpleañero Julián Torres se disculpó de su mal actuar y mostró un aparente comparendo por su indisciplina.
Los otros funcionarios implicados no han expresado disculpas pero si han justificado con comentarios en redes sociales como Facebook este hecho tan castigable.
El alcalde Dimar Barbosa Riobó, dos días después del hecho no ha dado a conocer las sanciones disciplinarias con respecto a sus funcionarios.
O acaso alcalde ¿la ley es para la población pero para sus funcionarios no? el país entero espera una sanción ejemplarizante ante esta violación de la ley.
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OTROS CASOS
En medio de la cuarentena para prevenir la expansión del coronavirus, varios funcionarios en el país se han puesto la ley de corbata.
En Villavicencio, Meta, tres funcionarios organizaron una fiesta privada. El alcalde Felipe Harman sancionó a los implicados y los destituyó de sus cargos.
Para finales de abril, parte del gabinete del municipio Puente Nacional en Santander realizaron una fiesta en el palacio municipal. Se les abrió investigación.
En La Dorada, Caldas, el alcalde César Arturo Alzate denunció él mismo al jefe de bienestar social que festejaba su cumpleaños. ¿Sucederá en Convención?
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